martes, 16 de agosto de 2016

SIBIMET PULCHERRIMA MERCES

Piel de León que cuelga sobre la Clava de Hércules
Empresa de Pompeo Vizani
[Segni, 1601]


Presentamos en esta ocasión el Emblema que Iulius Signius dedicó a su colega y amigo Pompeo Vizani, y que acompañaba con la siguiente "subscriptio":

            Magnanimum Alcidem decoravit Clava, Leonis
            Tergus et hirsuti, solidae Virtutis imago,
            Quae sibi stat pretium, nec laudibus indiget ullis.
            Illa trophea tibi debentur, candide Scriptor
            Vizani, cuius monumentum grande laborum
            Te satis illustrem reddit sine munere vatum.

Los Vizani fueron una de las más grandes familias de Bolonia, con Pompeo Vizani (1540-1607) como uno de sus más celebrados representantes, ilustre literato e historiador, recordado principalmente por sus Diece Libri delle Historie (Bologna, Heredi di Gio. Rossi. 1601, obra de la que se extrae este emblema). El escudo de los Señores de Vizani era un cerdo negro con un fajín o cinturón blanco (Croce, 2006: 54), pero en este caso Giulio Segni optó por la figura del magnánimo Alcides para enaltecer la figura de Pompeo. Este Segni fue un poeta latino menor afincado en Bolonia, autor de Scelta di varii poemi volgari, et latini (Bolonia, 1583). En 1597, con motivo de las honras literarias publicadas para adorno del túmulo por las exequias del senador boloñés Camillo Paleotti (Bolonia, 1597), tuvo ya ocasión de honrar a su amigo:

            Gesta tui memora, Vizani, splendida Civis,
            Scriptor Felsineae nobilis Historiae. 

El mote, "[La Virtud] En sí misma, la más hermosa de las recompensas", lo toma Segni de Silius Italicus (Punica XIII, 663: "Ipsa quidem Virtus sibimet pulcherrima merces". véase Itálico, 2005: 490); y en el mismo sentido, Claudiano (17, 1): "Ipsa quidem Virtus pretium sibi". En palabras de Bartolomé Jiménez Patón: "[...] como a la virtud acompaña la verdadera honra, resplandece con las dignidades verdaderas, que es el premio que ella misma tiene en sí: Virtus merces sui ipsius" (Comentarios, 2010: 110). El mote ya lo había empleado Camerarius en su Symbolorum et Emblematum, III, 20 (1596), con la figura de un pavo real, símbolo de la Virtud, un emblema tomado de Giulio Cesare Capaccio (Delle Impresse, 1592, III: 12): "Mas, por hechos de Virtud, lleva por Empresa el Pavo Giovan Vincenzo Egidii, Cavallero gentilísimo que fue en vida, y será tras su muerte, y no por menos debemos dedicarle las palabras de Silio, Sibi met pulcherrima merces, en loa de la Virtud" (Cf. Valeriano, Hieroglyphicorum collectanea, 1610: 200).

La Clava y la Piel de León que adornan a Hércules son símbolos de la Virtud, siendo ésta la más bella de las recompensas, pues el hombre verdaderamente virtuoso no necesita de alabanza alguna. Aquéllos trofeos dedica el autor a Vizani, cuya monumental obra lo hará famoso entre todos los poetas. 

Hércules, como símbolo de la Virtud, queda perfectamente retratado en la obra de Calvete de Estrella, quien describe un "jeroglífico" que anticipa de algún modo el emblema que nos ocupa, con el mote Colit Ardua Virtus ("La Virtud no mora, sino en las cosas altas") y donde se dibuja un "Hércules armado como la Virtud, y tenía en sus manos una maça de armas", con la siguiente subscriptio: "[...] versos, que los dezía Hércules a la Virtud. Pulchra tua est merces Virtus, [...]. Hermoso premio es el tuyo Virtud". (Calvete, 1552: 218v).

No fueron, por tanto, la Clava y la Pellica los trofeos más importantes de Hércules, sino que el más alto premio fue su propia Virtud, la cual le llevó a ser honrado entre los inmortales. Lope, siguiendo a Itálico, nos dijo que los virtuosos no deben ser premiados por ello: "Pues la virtud es premio de si propia" (Soneto XXXVIII, a Pedro Liñán. Cf. Arcadia (1605: 395), El Tirano castigado, Jerusalén conquistada, XVII), pero Jerónimo Jiménez de Urrea quizá nos lo aclare: "El virtuoso no dessea que le hagan honrra por ambición, ni desseo de ser loado, sino para pagar sus obras como ellas merecen, y poner la honrra donde ella deve estar" (Urrea, 1566: 79v). Por concluir, citemos al gran Catón, que un tanto pragmático nos dice: "[...] aquéllos que quitan a la Virtud su honrra y premio, son causa que los mancebos huyan della" (Erasmo, Apothegmas, 1549: 218v).

Para Hércules y sus Atributos en relación a la Virtud, véase Gille (Novum III, 15), Ripa ("Virtud heroica"). Saavedra tomará la pictura en otro sentido (v. Saavedra, 97)